Tonin Teligencia leía las anotaciones que tenía escritas en un papel antes de cada entrenamiento y de cada partido. Cuando empezó a hacerlo le costaba un poco. Ahora ya se las sabía de memoria. No obstante le servía como señal para iniciar su concentración. En el papel estaban escritas sus normas, las que le eran necesarias para desarrollar su frontenis al máximo. No eran muchas indicaciones, pero si que le recordaban en qué puntos debía mejorar. Ese pequeño detalle, llevado con constancia durante los dos últimos meses le había ayudado mucho. Al principio le pareció hasta ridículo. Pero se fiaba totalmente de su entrenador. Así que, pese a las dudas iniciales, Tonin se impuso esta norma a rajatabla. Y le funcionó. Le daba tranquilidad y triunfos.
Allí tenía escrito, como recordatorio, lo más importante para él. Lo que sabía que en caso de no aplicarlo, le complicaba la existencia frontenística.
Antón Tao, andaba mosqueado. En un despiste de Tonín le quitó la hoja y leyó:
1.- Entrenamiento=máximo
2.- Apoyo pies
3.- 80% en posición
4.- Ánimo compañero.
5.- Oración inicio
6.- Siempre levantada
7.- Saque ventaja
8.- Dos condiciones mate: que no esté y que pueda
9.- Nada imposible
10.- Satisfacción.
Antón Tao dejó de nuevo la hoja en la bolsa de deportes de Tonin. "¡Vaya gilipollez"
Buenas
ResponderEliminarAquí un Antón Tao... Yo creo que el problema debe de ser que el ser humano sólo es capaz de recordar listas de siete elementos. Al poner 10, como no somos capaces de recordarlas, lo dejamos ;-).
Si que es útil si. Yo he ido incluyendo algunos elementos de esa lista y creo que ya salen de un modo automático. Por ejemplo, la raqueta siempre levantada, con el marco por encima del puño. Me costó pero creo que lo he conseguido... una cosa menos.
Otra que ya hago en partidos "oficiales" es calentar siempre. Y cuando digo siempre es siempre. Me falta hacerlo en los entrenamientos.
En fin, poco a poco... tendré que recuperar mi lista y retomarla...
Igual en diez años me cambio de nombre a Toñin Teligencia. Bueno, espero que sea en diez meses, digo... en siete :-)
Un abrazo!